Chicago, EE. UU. – En el barrio latino conocido como La Villita, agentes federales dispararon gases lacrimógenos contra manifestantes, a pesar de que un juez federal había emitido el 9 de octubre una orden de restricción temporal que prohibía el uso de estas sustancias salvo ante una amenaza directa. La acción provocó la indignación de los residentes, quienes salieron a las calles a exigir que los agentes se retiraran.
Testigos relataron momentos de tensión, con manifestantes afectados por las sustancias químicas. Algunos, como un vecino que no participaba en la protesta, denunciaron haber sido alcanzados sin razón aparente. La policía de Chicago acudió al lugar para mantener la seguridad pública, pero los detalles sobre la cantidad de arrestos y los motivos aún no han sido precisados.
El comandante de la Patrulla Fronteriza, Creg Bovino, estuvo presente en medio de la nube de gas, mientras Telemundo informó que el Departamento de Seguridad Nacional y la propia Patrulla Fronteriza no habían ofrecido comentarios oficiales sobre el incidente. Los vecinos aseguran que continuarán resistiendo y manteniéndose unidos ante lo que consideran un uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes federales.
