Washington. — La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó este lunes la apelación presentada por Ghislaine Maxwell, la exnovia y colaboradora del fallecido financiero Jeffrey Epstein, quien cumple una condena de 20 años de prisión por delitos de tráfico sexual de menores.
En el inicio de su nuevo período judicial, los magistrados del alto tribunal decidieron no revisar el caso, evitando así reabrir uno de los capítulos más controvertidos de los últimos años. Como es habitual, la Corte no explicó los motivos de su decisión, pese al interés mediático y político que rodea al expediente.
Los abogados de Maxwell argumentaban que su enjuiciamiento fue ilegal porque un acuerdo de no enjuiciamiento firmado por fiscales federales en Miami en 2007 con Epstein debía extenderse a sus “potenciales coconspiradores”, lo que habría impedido los cargos federales presentados en Nueva York. Sin embargo, tanto el tribunal de apelaciones como ahora la Corte Suprema rechazaron esa interpretación.
Maxwell fue condenada en 2021 por atraer y facilitar el abuso sexual de adolescentes para Epstein, en un juicio que incluyó los testimonios de cuatro mujeres que relataron haber sido víctimas siendo menores durante las décadas de 1990 y 2000.
Actualmente, la exsocialité británica se encuentra recluida en una prisión de mínima seguridad en Texas, a donde fue trasladada desde Florida. Su defensa, encabezada por David Oscar Markus, sostiene que ella “es inocente y nunca debió haber sido juzgada, mucho menos condenada”.
La decisión del Supremo coincide con la intención del gobierno republicano de Donald Trump de evitar reabrir el caso Epstein, que generó fuertes críticas y teorías de conspiración tras la muerte del magnate en una celda en 2019.
El Departamento de Justicia reiteró recientemente que no existen documentos adicionales del caso que puedan ser divulgados, argumentando que gran parte del material permanece sellado por orden judicial para proteger a las víctimas.
El fallo cierra, al menos judicialmente, otro capítulo del escándalo sexual y de poder que involucró a empresarios, políticos y celebridades de alto perfil, mientras Maxwell continúa cumpliendo su condena por los delitos cometidos junto a Epstein.