SANTO DOMINGO – El periodista Virgilio Félix puso en duda cómo ciertas personas lograron crear una influencia significativa en instituciones clave del país durante ocho años sin que nadie lo advirtiera. Durante su intervención en El Sol de la Mañana de Sol 106.5, Félix destacó que esta situación genera más preguntas que respuestas sobre el control y la supervisión en sectores estratégicos, especialmente en áreas como el eléctrico y de compras gubernamentales.
Félix recordó que, pese a los vínculos familiares de algunos involucrados, la magnitud de su influencia pasó desapercibida, permitiéndoles operar con tranquilidad durante años, mientras otros ciudadanos enfrentaban sanciones inmediatas por faltas menores. “¿Cómo uno crea tanta influencia durante ocho años y nadie lo notó?”, cuestionó, subrayando la necesidad de transparencia y rendición de cuentas en la gestión pública.
El comunicador también aprovechó para resaltar la importancia de la vigilancia ciudadana y la labor de los medios de comunicación. Según Félix, casos como estos reflejan fallas sistémicas que deben corregirse para garantizar que la justicia sea equitativa y que los recursos del Estado no sean manipulados en beneficio de unos pocos.
Félix insistió en que esta situación evidencia un vacío en los mecanismos de control dentro de las instituciones públicas. Señaló que la falta de supervisión permitió que ciertas personas se aprovecharan de su posición para influir en decisiones clave sin ser detectadas. “Esto no solo afecta la transparencia, sino también la confianza de la ciudadanía en sus instituciones”, subrayó.
Asimismo, destacó que la permanencia de esta influencia durante tantos años genera un precedente preocupante para futuros funcionarios y empresarios. Según el comunicador, es urgente establecer procesos claros de auditoría y monitoreo que impidan que individuos acumulen poder fuera del alcance de la ley y de la ética administrativa.
Finalmente, Félix llamó a los ciudadanos a mantenerse atentos y a exigir rendición de cuentas. Recordó que la vigilancia social y mediática es clave para evitar que se repitan situaciones similares. “Si la gente no pregunta, si los medios no investigan, estas prácticas pueden continuar sin que nadie las detenga”, concluyó, enfatizando la responsabilidad colectiva en la defensa de la integridad institucional.