En un encuentro clave para la estabilidad económica del país, el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, el ministro de Hacienda y Economía, Magín Díaz, y el superintendente de Bancos, Alejandro Fernández, sostuvieron una reunión con los presidentes del sector financiero dominicano. El objetivo principal fue evaluar el comportamiento de la economía nacional y discutir previsiones ante el actual contexto internacional.

Durante el encuentro, Valdez Albizu destacó que, pese a la volatilidad reciente del tipo de cambio, no existen factores macroeconómicos que la justifiquen más allá del efecto estacional de septiembre por la compra de inventarios de fin de año. Subrayó la importancia de actuar con prudencia para mantener la estabilidad y fortalecer la confianza de inversionistas y agentes económicos tanto nacionales como internacionales.

El ministro Magín Díaz y el superintendente Alejandro Fernández coincidieron en la necesidad de coordinación entre autoridades y sector financiero para anticipar riesgos y garantizar que las medidas que se adopten no afecten la dinámica económica ni la liquidez del sistema bancario.

Asimismo, se enfatizó que la estabilidad del tipo de cambio y la solvencia del sistema financiero siguen siendo prioridades del gobierno, en un escenario marcado por incertidumbre global y presiones externas sobre las economías emergentes.

Los presidentes de los bancos presentes reafirmaron su compromiso de apoyar políticas que contribuyan al crecimiento sostenible del país, además de mantener una comunicación abierta y constante con las autoridades monetarias y fiscales.

El encuentro concluyó con el compromiso de seguir monitoreando de cerca los indicadores financieros y económicos, y de reunirse periódicamente para tomar decisiones oportunas que aseguren la confianza del mercado y la estabilidad del sistema financiero dominicano.

Durante la reunión, se abordaron además las perspectivas de inversión extranjera y el impacto de la demanda interna en sectores estratégicos como turismo, remesas y comercio, los cuales contribuyen significativamente a la entrada de divisas al país. Valdez Albizu resaltó que, aunque el dólar ha mostrado cierta volatilidad, las reservas internacionales del Banco Central y la continuidad de la inversión extranjera permiten prever un manejo adecuado de la situación.

Finalmente, las autoridades anunciaron que se mantendrá un monitoreo constante de la morosidad en préstamos y tarjetas de crédito, un indicador sensible del comportamiento económico, para aplicar medidas preventivas si fuera necesario. La coordinación entre gobierno y sector financiero busca asegurar que cualquier ajuste monetario fortalezca la economía sin afectar a la población ni al funcionamiento de los bancos.