El comunicador Julio Hazim afirmó este sábado que, sin importar la postura de Estados Unidos, la República Dominicana debe prestar atención a sus decisiones, dado que el Caribe sigue siendo una región de dependencia histórica, económica y estratégica del país norteamericano.
Hazim recordó que, independientemente de que el mundo haya sido unipolar después de la Segunda Guerra Mundial, bipolar durante la Guerra Fría, o se encuentre ahora en un aparente orden multipolar, la cercanía geográfica y la interdependencia con Estados Unidos obligan a República Dominicana a considerar sus posiciones. “Todo lo que Estados Unidos piense, haga o pida, tenemos que prestarle atención”, señaló.
El comunicador se refirió al informe publicado por el Departamento de Estado titulado Declaraciones de clima de inversión República Dominicana 2025, que destaca avances económicos, pero señala preocupaciones de inversionistas sobre la informalidad, la seguridad ciudadana, licitaciones problemáticas y la falta de competencia técnica en algunos ministerios. Hazim enfatizó que estas críticas no buscan desestabilizar, sino que deben ser consideradas seriamente por el gobierno dominicano.
Asimismo, resaltó la importancia estratégica de ciertos territorios y puertos, como la bahía de Manzanillo, que históricamente han servido como punto de entrada de mercancías en la región. Señaló que decisiones pasadas, como la apertura de relaciones con China, tuvieron impactos económicos positivos, pero también generaron presiones externas sobre la gestión de áreas estratégicas.
Hazim destacó que, aunque el gobierno del presidente Luis Abinader ha mostrado buenas intenciones y logros en la implementación de políticas para atraer inversión extranjera, existen limitaciones estructurales que dificultan la resolución de problemas como la corrupción, la burocracia y la informalidad laboral.
Finalmente, el comunicador puntualizó que, más allá de la interpretación o crítica de los informes, la realidad es que las decisiones de Estados Unidos tienen un peso ineludible en la República Dominicana y que el país debe navegar estas relaciones con prudencia y conocimiento histórico.