SANTO DOMINGO.— Rubén Bichara ofreció este miércoles un análisis profundo sobre la crisis eléctrica que afecta al país y las medidas necesarias para ponerle fin a los recurrentes apagones.

Bichara recordó que durante su gestión se enfrentó a un déficit energético significativo y a la dependencia de más del 50% de la generación con petróleo, lo que consideró económicamente insostenible. “Cuando llegamos, la primera acción fue ampliar y diversificar la generación. Se inició Punta Catalina porque no había gas disponible y no se podía esperar más”, explicó. Según él, esta planta ha sido clave para abaratar costos y garantizar energía suficiente, evitando que el déficit alcanzara niveles críticos.

El exfuncionario criticó la falta de planificación actual, señalando que la demora en el mantenimiento de las redes y la paralización de proyectos ha agravado la crisis. “Cualquier proyecto de generación lleva años; anunciarlo rápido no significa resolverlo rápido”, afirmó, al tiempo que destacó la importancia de implementar un plan integral de mantenimiento y adquisición de equipos críticos como transformadores.

Bichara también se refirió a propuestas innovadoras, como la compra de energía a través de un cable submarino desde Estados Unidos, similar a experiencias europeas, lo que, según él, aportaría seguridad energética al país. Además, aclaró que el costo de Punta Catalina fue de 2,454 millones de dólares, sin incluir intereses financieros, y resaltó que la planta ya genera ahorros significativos en el déficit del sector eléctrico.

Finalmente, el exejecutivo enfatizó que la solución a la crisis requiere planificación anticipada, inversión sostenida y decisiones técnicas basadas en la realidad del sistema eléctrico, más allá de anuncios mediáticos o medidas de emergencia.

Bichara insistió en que la solución a los apagones no es inmediata y requiere planificación a largo plazo: “No se puede improvisar. Cada transformador, cada subestación, cada proyecto de generación necesita tiempo, recursos y coordinación. La única forma de acabar con los apagones es combinando mantenimiento riguroso, expansión de la generación y diversificación de la matriz energética, además de apostar por soluciones innovadoras como cables submarinos para importar energía de forma segura y eficiente”.