En medio de un aumento de casos de agresividad y trastornos emocionales, expertos alertan que más del 30% de los jóvenes presentan síntomas de depresión o ansiedad que podrían afectar gravemente su salud mental. La psicóloga Catherine Castro advierte que el estrés crónico, el burnout y la ansiedad se han normalizado, generando una especie de “segunda pandemia” tras el COVID-19.
Castro señala que la desconexión con el bienestar integral, donde cuerpo, mente y alma requieren atención conjunta, ha llevado a que muchos jóvenes vivan con estos problemas sin buscar ayuda. “Estamos acostumbrados a coexistir con la ansiedad y el estrés como si fuera algo normal, pero es una alerta que no podemos ignorar”, afirmó la especialista.
Por su parte, la comunicadora Dayanara Reyes Pujol enfatiza la necesidad de crear espacios seguros para los jóvenes y promover la cultura de pedir ayuda como un acto de valentía. Además, insta a familias, sociedad e instituciones educativas a priorizar la salud mental, tratándola con la misma importancia que el rendimiento académico o profesional.