La comunicadora Julieta Tejada expresó este viernes su profunda sorpresa e indignación ante la reciente decisión judicial que otorgó libertad condicional al ex diplomático Donni Santana, condenado en 2019 a 20 años de cárcel por agredir sexualmente a su hijastra cuando esta era menor de edad.
Durante su intervención, Tejada calificó la medida como un acto que “ha sorprendido al país”, señalando que Santana ahora podrá dar clases a reclusos bajo un programa del Colegio Dominicano de Abogados, mientras goza de libertad plena de lunes a viernes, con régimen de prisión domiciliaria solo los fines de semana. Para Tejada, esta decisión genera un mensaje contradictorio respecto a la protección de niños, niñas y adolescentes, y cuestiona la coherencia entre las narrativas del Estado y sus acciones.
La comunicadora también hizo un llamado al Consejo Superior del Poder Judicial para investigar la actuación del juez responsable, argumentando que decisiones como esta pueden socavar la confianza de la sociedad en el sistema judicial y transmitir una sensación de permisividad hacia delitos graves. Tejada enfatizó la necesidad de que la justicia envíe mensajes claros y contundentes, especialmente en casos que involucran la seguridad y el bienestar de los menores.
Tejada recordó que el caso de Santana ha sido emblemático por la gravedad del delito y por las responsabilidades que implicaban sus funciones diplomáticas al momento de los hechos, lo que, según ella, hace aún más incomprensible que se le otorgue un régimen de libertad tan amplio. “La sociedad espera justicia y protección para los más vulnerables, no privilegios para quienes han cometido actos reprochables”, indicó.
La comunicadora también cuestionó la actitud del Colegio Dominicano de Abogados, que permitió que Santana imparta clases a reclusos, señalando que esta decisión envía un mensaje equivocado sobre la reeducación y la reinserción social de personas condenadas por delitos sexuales. Según Tejada, la medida podría generar indignación y desconfianza en los programas penitenciarios.
Finalmente, Julieta Tejada insistió en que este caso debe servir como un punto de reflexión para que las autoridades judiciales revisen sus criterios y actúen con mayor responsabilidad, recordando que la protección del interés superior del niño debe prevalecer sobre cualquier otro interés particular. “La justicia debe ser firme, coherente y ejemplarizante, sobre todo cuando se trata de defender a quienes no pueden protegerse por sí mismos”, concluyó.