La comunicadora Julieta Tejada, en su participación en el programa “Politiqueando RD”, ha generado un fuerte debate al afirmar que el expresidente Leonel Fernández podría verse en la “obligación” de apoyar a su hijo, Omar Fernández, como candidato presidencial para el 2028.
Esta declaración se produce en un contexto de intensa discusión sobre el futuro de la Fuerza del Pueblo (FP) y las dinámicas internas del partido.
Omar, ¿el fenómeno político del momento?
Tejada describió a Omar Fernández como un “fenómeno político” y un “joven brillante”, sugiriendo que el “momento” y la inclinación del electorado, especialmente la “generación Z”, podrían determinar el apoyo de Leonel.
A pesar de su fuerte militancia en la FP, Tejada enfatizó que no es parte de ningún “equipo” interno, sino que apoya tanto a Omar como a Leonel en lo que sea necesario. Sin embargo, no descartó la posibilidad de que, de imponerse Omar en la preferencia popular, Leonel no se opondría a la candidatura de su hijo.
El debate en el programa también tocó temas espinosos dentro de la Fuerza del Pueblo. Se cuestionó la falta de representación femenina en los puestos de dirección del partido, señalando que, a pesar de las expectativas de ser “un partido diferente”, la realidad es que es “lo mismo que el PLD, un partido de machos”. Se puso como ejemplo el caso de la candidata a senadora Xiomara Valerio, quien fue “quitada” de su posición para dar paso a otros candidatos por “compromisos” políticos.
El panel criticó la estrategia de la FP de “capitalizar” la situación de Senasa, calificándola de “desgracia nacional” y una “irresponsabilidad” política. Se debatió sobre la falta de documentación y argumentos sólidos por parte de algunos voceros del partido al abordar el tema de Senasa, a pesar de las advertencias previas hechas por la FP sobre las irregularidades en la institución.
Uno de los puntos más relevantes del debate giró en torno a la Ley 87-01 (Ley General de Salud), que, según los panelistas, no ha sido aplicada correctamente por ningún gobierno desde su aprobación en 2001. Emilio López, otro de los participantes, argumentó que esta falta de aplicación ha creado un “serio problema estructural” en el sector salud y ha propiciado un sistema “abierto a fraude”. La discusión resaltó que la responsabilidad de esta situación recae en los gobiernos pasados y el actual, quienes no han tenido “los pantalones” para implementar la ley.