Un hecho trágico conmocionó a la comunidad de Guajimía Segundo, en Santo Domingo Oeste, cuando un joven de 19 años mató a puñaladas a un adolescente de 17 tras una discusión por un cigarrillo electrónico o vape.

La víctima fue identificada como Josué Martínez Reyoso, quien falleció en el hospital municipal de Engombe debido a las graves heridas recibidas en el pecho.

Según la versión de los familiares, el agresor, identificado como Ranel Encarnación, atacó al adolescente luego de acusarlo de haberle escondido el dispositivo. En medio de la disputa, Encarnación lo hirió mortalmente, provocando que Martínez fuera trasladado de emergencia en un motor de delivery hasta el hospital, donde finalmente murió.

Arisleira Reinoso Erasme, madre del fallecido, narró que su hijo no era una persona problemática, sino un joven que estudiaba barbería en Infotec y realizaba cursos de informática. Denunció que el agresor habría amenazado previamente con matarlo, lo que terminó cumpliendo días después.

Los familiares de la víctima temen que el caso quede impune, ya que aseguran que la madre del responsable trabaja en la fiscalía y podría influir en el proceso judicial. Mientras tanto, los restos de Josué Martínez están siendo velados en su residencia, donde vecinos y allegados se han unido para exigir justicia y que el hecho no quede en la impunidad.

¿Es peligroso el cigarrillo electrónico para la salud humana?

El cigarrillo electrónico o vape ha sido promovido como una alternativa “menos dañina” al tabaco tradicional, pero la evidencia científica indica que no está exento de riesgos para la salud. Al inhalar el vapor, el cuerpo recibe sustancias químicas como nicotina, propilenglicol, glicerina vegetal y saborizantes, muchos de los cuales pueden irritar los pulmones y las vías respiratorias.

La nicotina es altamente adictiva y puede afectar el desarrollo cerebral en adolescentes, además de aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y presión arterial elevada. Algunos estudios han detectado compuestos tóxicos y metales pesados liberados por las resistencias del dispositivo, lo que puede causar inflamación pulmonar y daño celular.

Además, el uso prolongado de vapes puede generar efectos desconocidos a largo plazo, dado que se trata de una tecnología relativamente nueva. Existen reportes de casos graves de enfermedades respiratorias, como la EVALI (E-cigarette or Vaping Product Use-Associated Lung Injury), donde los pulmones se inflaman severamente por la exposición a ciertos aditivos y aceites presentes en los líquidos de vapeo. En adolescentes y jóvenes, además del daño físico, el vape puede fomentar hábitos de consumo de nicotina que derivan en adicciones y mayor probabilidad de consumir otros productos tabacaleros, haciendo de esta práctica un riesgo significativo para la salud integral.