Pamela Sandoval, intérprete en un video musical que ha causado controversia por haberse grabado en un centro educativo, se desmarcó públicamente de la elección del lugar y aseguró que fue contratada bajo la premisa de que la locación era una escuela abandonada.
A través de sus redes sociales, la joven artista explicó que su participación se limitó estrictamente a seguir las instrucciones del director y el equipo de producción, sin tener conocimiento ni responsabilidad sobre la logística del rodaje.
“Fui contratada para un proyecto que, según me informaron, se llevaría a cabo en una escuela en desuso. En ningún momento participé en la elección del lugar ni en aspectos organizativos”, escribió Sandoval.
La polémica surgió tras la difusión del video musical, que fue grabado en lo que aparentemente es una institución educativa en funcionamiento, lo que generó críticas y preocupación por parte del público y autoridades.
Pamela Sandoval señaló que, al darse cuenta del impacto negativo, decidió eliminar el contenido de sus redes sociales y se mostró abierta a colaborar con cualquier investigación en curso: “Estoy dispuesta a colaborar para que se aclare esta situación, porque respeto profundamente a la comunidad educativa y al público que me sigue”.
Hasta el momento, no se ha confirmado si se ha iniciado una investigación formal por parte de las autoridades.