La comunicadora Diulka Pérez hizo un enérgico llamado este martes a las autoridades y a la sociedad dominicana para enfrentar de manera firme la prostitución en destinos turísticos del país, especialmente en Puerto Plata, Sosúa y Cabarete. Pérez advirtió que este fenómeno no solo afecta la imagen internacional de República Dominicana, sino que también deteriora la seguridad y los valores en las comunidades locales.
La periodista recordó el reciente caso del asesinato del ciudadano estadounidense John Eric Santos, presuntamente a manos de una trabajadora sexual de 19 años, como un ejemplo de cómo la prostitución suele estar vinculada con hechos de criminalidad, violencia y consumo de drogas. A su juicio, el turismo sexual nunca debe formar parte de la oferta dominicana, ya que pone en riesgo la reputación de un destino que debe promoverse como seguro, familiar y cultural.
Asimismo, Pérez subrayó que la prostitución en estas zonas no se limita a nacionales dominicanas, sino que también involucra a extranjeras de distintas procedencias, lo que agrava aún más el problema. Hizo un llamado a reforzar la regulación, la vigilancia y la acción judicial, instando a que el país no tolere un turismo basado en explotación sexual, sino que apueste por experiencias auténticas que resalten las bellezas naturales y la hospitalidad de los dominicanos.
Pérez también criticó que algunas autoridades locales hayan sido permisivas con este tipo de actividades, incluso beneficiándose económicamente de negocios que promueven la prostitución. “No podemos seguir mirando hacia otro lado mientras se compromete el futuro de nuestros destinos turísticos”, sostuvo, al tiempo que pidió mayor compromiso de los ayuntamientos y de los organismos de seguridad.
La comunicadora insistió en que, aunque la prostitución no esté formalmente prohibida en el país, sus efectos colaterales como la trata de personas, la explotación de menores y la criminalidad convierten este fenómeno en una amenaza directa para la sociedad. “No se trata solo de sexo, se trata de lo que trae detrás: drogas, violencia y corrupción”, puntualizó.
Finalmente, hizo un llamado a la población a respaldar los esfuerzos de limpieza moral y de promoción de un turismo más saludable, recordando que la hospitalidad, la cultura y la belleza natural del país deben ser los pilares de la industria. “La República Dominicana tiene mucho más que ofrecer al mundo que playas manchadas por el turismo sexual”, afirmó Pérez.