Santo Domingo. – La Unión Dominicana de Centros Nocturnos y Diversión, junto a comerciantes y consumidores, expresó su rechazo al reciente anuncio de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) sobre el aumento del impuesto selectivo al consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillos.

Propietarios de bares, colmados y centros de diversión alertan que la medida afectará gravemente las ventas, las cuales ya han caído más del 50% en algunos establecimientos. “La bebida alcohólica está cara para venderla en los centros nocturnos y también para comprarla en las casas licoreras”, señaló uno de los comerciantes afectados.

Consumidores también manifestaron preocupación por el impacto económico: “La situación no está buena para aumentar esto. Cada quien gasta hasta donde puede, pero hay gente que no podrá pagar los nuevos precios”, expresó un cliente habitual. Algunos sugieren que sería más efectivo reducir los impuestos a la comida que a los productos de consumo recreativo.

Expertos en salud, como médicos y especialistas en salud pública, consideran que aumentar los precios podría ayudar a regular el consumo, pero advierten sobre el riesgo de proliferación del mercado ilegal de alcohol y cigarrillos. Mientras tanto, economistas y representantes de empresas locales cuestionan si los impuestos generarán la recaudación esperada, dada la alta presencia.

Además, líderes del sector empresarial señalaron que los aumentos podrían ahuyentar a los consumidores hacia productos ilegales o importaciones informales, afectando tanto a los negocios formales como a la recaudación fiscal. “Mientras más impuestos se le pongan a estas bebidas, más se incentiva el mercado ilegal, y eso termina perjudicando a todos”, indicó Angelo Viró, presidente de la Asociación Nacional de Empresas e Industriales.

Por su parte, los dueños de bares y centros nocturnos anunciaron que se reunirán en los próximos días para definir estrategias conjuntas y exigir una revisión de la medida. Aseguran que, de no revertirse el aumento, podrían implementar ajustes en los precios y promociones que impacten directamente en la clientela, lo que podría generar un efecto negativo en el sector entretenimiento del país.