Kahramanmaras, Turquía – Un brutal caso de feminicidio conmociona a Turquía luego de que Eser Karaca, de 42 años y madre de dos hijos, fuera asesinada por su exesposo dentro del hospital donde trabajaba como secretaria médica. El ataque ocurrió el mismo día en que Karaca había solicitado una tercera orden de restricción contra su agresor, según informaron medios locales.

El agresor, identificado como Atilla Ayintapli, de 44 años, ingresó al hospital con una bolsa de plástico que ocultaba una escopeta. Cámaras de seguridad captaron el momento en que irrumpió en la oficina de Karaca, quien intentó escapar junto a una compañera de trabajo, siendo alcanzada por el hombre en una escalera, donde le disparó en varias ocasiones.

A pesar de los esfuerzos de sus colegas por brindarle atención de urgencia, las heridas sufridas por Karaca resultaron mortales. Las autoridades señalaron que el crimen ocurrió pese a las reiteradas denuncias y órdenes de alejamiento que la víctima había interpuesto anteriormente, sin que estas medidas pudieran evitar la violencia.

Tras el ataque, Ayintapli huyó del hospital, aunque fue capturado pocas horas después por las autoridades locales. Durante el interrogatorio, el hombre confesó el asesinato y ahora enfrenta cargos por homicidio y amenazas con arma de fuego.

La Fiscalía turca solicitó cadena perpetua para el acusado, quien permanece detenido a la espera de juicio. Las investigaciones revelan que el agresor insistía en retomar la relación con Karaca a pesar de los antecedentes de maltrato y las constantes negativas de la mujer.

Organizaciones locales de derechos de las mujeres han expresado su consternación ante el caso y reiteran la necesidad de fortalecer la protección legal para víctimas de violencia de género, señalando que la medida de restricción no fue suficiente para prevenir el feminicidio.

Continúan las muertes…

El feminicidio es el asesinato de una mujer por razones de género, generalmente motivado por odio, desprecio o discriminación hacia las mujeres. Este delito se distingue de otros homicidios por la intención específica de ejercer control, violencia o castigo sobre la víctima simplemente por ser mujer, y suele estar relacionado con contextos de violencia doméstica, abuso sexual, acoso o conflictos de pareja. En muchos países, el feminicidio está tipificado como un delito agravado en la legislación penal debido a su gravedad y las implicaciones sociales que conlleva.

Además de la muerte de la víctima, el concepto de feminicidio también abarca otras formas de violencia extrema que conducen a la muerte, incluyendo la negligencia de las autoridades para proteger a la mujer frente a amenazas conocidas. Las leyes contra el feminicidio buscan no solo sancionar a los agresores con penas severas, sino también visibilizar la problemática de la violencia de género y promover políticas de prevención, protección y educación para reducir la discriminación y la violencia contra las mujeres.