Las zonas francas de la República Dominicana registraron un crecimiento significativo en el último año, generando más de 198,000 empleos directos, según informaron autoridades durante un acto encabezado por el presidente Luis Abinader. Este sector aportó un 3.1% al Producto Interno Bruto (PIB) en 2024, reflejando un ecosistema industrial sólido y en expansión constante.
El ministro de Industria y Comercio detalló que las exportaciones desde las zonas francas superaron los $8,600 millones, equivalentes al 67% del total nacional, consolidando a estas áreas como zonas de confianza, innovación y oportunidades para la inversión. Desde 2020, se han aprobado 397 nuevas empresas y 37 parques industriales, alcanzando un total de 857 compañías activas en 95 parques.
Asimismo, el 54% de la fuerza laboral en las zonas francas son mujeres, muchas de ellas en posiciones estratégicas. Además, el 17% de los empleos corresponden a técnicos y administrativos. Las compras a la industria local crecieron un 15%, superando los 155,000 millones de pesos. Las autoridades destacaron que la industria de semiconductores se perfila como una nueva apuesta para generar empleos de calidad y atraer inversión.
Además, las zonas francas han fortalecido el encadenamiento productivo con la industria local, impulsando la economía nacional y generando mayores oportunidades para los proveedores dominicanos. Este crecimiento contribuye a diversificar la base industrial y a crear un entorno más competitivo y dinámico para el desarrollo empresarial.
El gobierno mantiene un firme compromiso con la expansión y modernización de las zonas francas, enfocándose en la atracción de inversiones de alto valor tecnológico y en la capacitación constante de la fuerza laboral para adaptarse a las demandas del mercado global. Esto incluye el impulso de sectores emergentes como la manufactura avanzada y la industria digital.
Por último, las autoridades subrayaron que el futuro de las zonas francas está ligado a la innovación y a la sostenibilidad, buscando fomentar prácticas responsables que integren el cuidado ambiental y el desarrollo social. Este enfoque integral busca consolidar a República Dominicana como un referente regional en la producción industrial de alta calidad y empleos bien remunerados.