Antonio Alberto Arias también enfrenta cargos por hacerse pasar por periodista para cometer otros delitos
La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional impuso tres meses de prisión preventiva contra Antonio Alberto Arias, acusado de sustraer una tarjeta bancaria y realizar consumos fraudulentos que superan los RD$100,000.00.
La medida fue dictada a solicitud del Ministerio Público, representado por el procurador fiscal Juan Manuel Vicente, adscrito a la Fiscalía Comunitaria de la carretera Sánchez. El fiscal presentó pruebas que comprometen la responsabilidad penal del imputado.
Según la acusación, el hecho ocurrió el pasado 1 de junio de 2025, alrededor de las 2:00 de la tarde, en la Casa San Pablo, ubicada en la avenida Rómulo Betancourt, sector Mirador Sur. Mientras la víctima, Jonathan Vicente de la Cruz, participaba en un evento, el imputado introdujo su mano en su bolsillo y sustrajo una tarjeta de crédito.
Pocos minutos después, Arias utilizó la tarjeta en distintos comercios, generando un consumo total de RD$108,750.00. Al notar los cargos, la víctima denunció el robo en el destacamento del Mirador Sur, iniciando una investigación por parte de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim).
Los agentes rastrearon una de las transacciones hasta una tienda en la avenida Churchill, donde las cámaras de seguridad permitieron identificar a Arias como el responsable. El Ministerio Público indicó que el imputado ya había sido investigado previamente por hechos similares.
De acuerdo con la acusación, las acciones de Arias constituyen una violación a los artículos 379 y 401 del Código Penal Dominicano, que tipifican el robo y la falsedad.
Cabe destacar que el pasado 22 de julio, Arias había recibido otras medidas de coerción –una garantía económica de RD$150,000.00, impedimento de salida del país y presentación periódica– luego de ser acusado de hacerse pasar por periodista para sustraer pertenencias durante actividades de prensa. En ese caso, la víctima fue Odil Dominga Beato, quien denunció el robo de su monedero y el uso fraudulento de sus tarjetas bancarias para comprar cigarrillos.
