Santo Domingo – El comunicador Pedro Jiménez expresó su indignación este martes ante la creciente crisis eléctrica en la República Dominicana, señalando que la población está cansada de que el gobierno se burle de los ciudadanos a través de los medios de comunicación. Según Jiménez, los prolongados apagones afectan a todos los sectores sociales y han obligado a muchos hogares a invertir en inversores y baterías que hoy resultan inútiles por falta de uso y mantenimiento.
Jiménez recordó que hace más de 15 años los apagones eran un problema grave, pero la situación había sido superada hasta el año 2020, cuando comenzaron a regresar las interrupciones del servicio. Destacó que, a pesar de la existencia de plantas construidas en gobiernos anteriores, la mala administración y los contratos onerosos con generadores privados han empeorado la situación.
El comunicador denunció que los apagones no solo afectan la vida cotidiana de la población, sino que también elevan costos y reducen la calidad de vida, obligando a familias trabajadoras a enfrentar noches sin luz y sin ventilación adecuada en medio del calor. Criticó la falta de soluciones del gobierno y la actitud de algunos funcionarios, a quienes acusó de priorizar su imagen y comodidad sobre las necesidades reales de los ciudadanos.
“Ya es tiempo de que enfrenten los problemas de este país y dejen de hacerse los payasos en los medios. La gente está cansada, aburrida y harta de que vengan a burlarse del pueblo dominicano”, concluyó Jiménez, advirtiendo que la paciencia de la población tiene un límite si no se toman medidas efectivas para garantizar el suministro eléctrico.
Expertos y ciudadanos coinciden en que la falta de planificación, mantenimiento y respuesta inmediata del gobierno podría generar mayor malestar social si no se implementan soluciones urgentes en el sector energético.
Jiménez también advirtió que la situación podría derivar en protestas y movilizaciones ciudadanas si no se corrige de manera inmediata, recordando que en décadas pasadas los apagones generaron fuertes reacciones populares. Según él, la combinación de falta de energía, aumento del costo de vida y percepción de indiferencia del gobierno está llevando a un hartazgo generalizado en todo el país.