Washington, EE. UU. – El gobierno de Estados Unidos reiteró su alerta de no viajar a Venezuela debido a los riesgos de detenciones arbitrarias, torturas, secuestros y disturbios civiles que enfrentan los ciudadanos en el país sudamericano.

La embajada estadounidense en Caracas permanece cerrada desde 2019, operando actualmente desde Colombia, lo que limita la asistencia consular directa para los ciudadanos estadounidenses que se encuentren en Venezuela.

La advertencia se suma a otras medidas de seguridad vigentes en la región y busca proteger a los viajeros de posibles situaciones de riesgo. El Departamento de Estado instó a sus ciudadanos a mantenerse informados y tomar precauciones estrictas si deben viajar a zonas cercanas.

Además, Estados Unidos señaló que la situación política y económica en Venezuela continúa siendo inestable, con altos niveles de violencia y criminalidad que afectan tanto a locales como a visitantes. Las autoridades estadounidenses destacaron que los servicios médicos y de emergencia pueden ser limitados o inexistentes en varias regiones del país.

El Departamento de Estado también recordó que los vuelos comerciales y operaciones bancarias enfrentan restricciones y dificultades en Venezuela, lo que complica la movilidad y el acceso a recursos básicos para los viajeros. Se recomendó tener planes alternativos y mantener comunicación constante con familiares o representantes legales.

Expertos en seguridad señalaron que la advertencia refleja un aumento en los incidentes de violencia y la falta de garantías legales en el país, reforzando la necesidad de extremar precauciones. Estados Unidos continuará evaluando la situación y ajustando sus recomendaciones de viaje según la evolución del contexto político y social en Venezuela.

Funcionarios estadounidenses indicaron que la medida busca además enviar un mensaje a sus ciudadanos sobre la importancia de evitar riesgos innecesarios, especialmente ante posibles conflictos internos y acciones delictivas dirigidas a extranjeros. Se enfatizó la necesidad de reportar cualquier incidente a las autoridades consulares para una pronta intervención.

La alerta también tiene un componente preventivo para empresas y organizaciones que operan en Venezuela, recomendando revisar protocolos de seguridad y considerar la suspensión temporal de actividades que impliquen desplazamiento de personal en el país. La medida se mantiene vigente hasta nuevo aviso, según comunicó el Departamento de Estado.