California.William McNeill Jr., el joven afroamericano de 22 años que fue golpeado violentamente por agentes policiales de Jacksonville, Florida, rompió el silencio este miércoles al presentarse ante los medios en California, acompañado de su familia y un equipo de abogados de derechos civiles.

En su declaración, McNeill relató que el día del incidente solo pedía explicaciones sobre el motivo de su detención, asegurando que no había cometido ninguna infracción y que sintió un profundo miedo durante el arresto. “Solo quería saber por qué me detenían. No hice nada malo”, expresó visiblemente afectado.

Los abogados calificaron el hecho como un acto injustificable de brutalidad policial y exigieron el despido inmediato del oficial involucrado. “No se puede justificar ni tolerar esto. Hay que condenarlo. Ese video no refleja el entrenamiento, las políticas ni los valores que debe tener una fuerza policial”, dijeron. Añadieron que explorarán todas las vías legales para garantizar justicia para McNeill.

Los hechos ocurrieron en Jacksonville, Florida, cuando McNeill fue detenido por una supuesta infracción de tránsito. Según el video difundido en redes sociales, el joven fue derribado al suelo y golpeado repetidamente por uno de los agentes, lo que ha generado una ola de indignación y protestas en distintas comunidades. La grabación ha sido ampliamente compartida como prueba de abuso de poder y discriminación racial.

Durante la rueda de prensa, la familia de William pidió al público que no se quede en silencio ante casos como este. “Hoy fue mi hijo, pero mañana puede ser el de cualquiera”, declaró su madre con voz entrecortada. También agradecieron el apoyo recibido por activistas, líderes comunitarios y ciudadanos que han levantado la voz en busca de justicia.

Organizaciones de derechos humanos ya han solicitado una investigación federal sobre el caso, mientras que las autoridades locales enfrentan una creciente presión para actuar. Hasta el momento, el oficial implicado no ha sido suspendido, lo que ha alimentado aún más la polémica. El equipo legal de McNeill reiteró que llevará el caso hasta las últimas consecuencias para que no quede impune.