El comunicador Virgilio Feliz criticó enérgicamente el funcionamiento del seguro de ley en República Dominicana, señalando que este tipo de cobertura vehicular mínima “no sirve para nada” y únicamente cumple la función de evitar que los conductores sean multados por falta de seguro.

Durante su participación en el programa El Sol de la Mañana, Feliz calificó como abusiva la reciente resolución que establece un aumento en el costo de los seguros obligatorios para vehículos, sin que estos garanticen protección real a los afectados por accidentes.

Feliz aseguró que los seguros de ley no ofrecen ninguna compensación efectiva en caso de colisión y denunció que son muchos los ciudadanos que terminan desprotegidos, especialmente cuando son impactados por vehículos del transporte público o motoconchistas. “Lo único que hacen es darte un papelito para enseñárselo a un agente de tránsito. Es como ir a un baño público, ver el papel higiénico y cuando lo necesitas, no hay. Eso es el seguro de ley”, expresó el comunicador, exigiendo una reforma integral del sistema para garantizar cobertura justa y eficaz a los ciudadanos.

Seguro de ley vehicular

En la República Dominicana, el seguro de ley vehicular es el seguro mínimo obligatorio que todo propietario de vehículo debe adquirir para poder circular legalmente. Su función principal es cubrir los daños a terceros, tanto personales como materiales, en caso de que el conductor sea responsable de un accidente. Este tipo de seguro no cubre los daños propios del vehículo asegurado ni lesiones del conductor; solo responde por los perjuicios ocasionados a otras personas involucradas.

El seguro de ley es requerido por la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT), y su no posesión puede acarrear multas, retención del vehículo o impedimentos para renovar el marbete. Aunque su costo es relativamente bajo, muchas personas critican su utilidad, ya que en la práctica suele tener coberturas muy limitadas y procesos burocráticos que dificultan el reclamo efectivo de los afectados.