Imágenes y videos nunca antes vistos, publicados este miércoles por CNN, han reavivado la polémica sobre la relación pasada entre el expresidente Donald Trump y el controvertido financista Jeffrey Epstein.
El material, basado en archivos de eventos sociales de las décadas de 1990 y 2000, muestra la cercanía entre ambos, incluyendo la presencia de Epstein en la boda de Trump con Marla Maples en 1993, celebrada en el Hotel Plaza de Nueva York.
Estas revelaciones se producen en un contexto de creciente presión política para que Trump publique un informe completo sobre la investigación por tráfico sexual que involucró a Epstein.
La divulgación de estas imágenes coincide con un revés legal para el expresidente, luego de que un juez federal en Florida rechazara la solicitud del gobierno de Trump para desclasificar las transcripciones del gran jurado relacionadas con el caso Epstein.
La petición también contemplaba trasladar el expediente a Nueva York, donde Epstein fue formalmente acusado en 2019. El Departamento de Justicia defendió la medida alegando la importancia de la transparencia y el interés público, pero la negativa judicial mantiene los documentos bajo confidencialidad.
Aunque no existen evidencias que vinculen directamente a Trump con los delitos cometidos por Epstein, la revelación de su asociación pública genera mayor escrutinio y críticas, incluso dentro de las filas republicanas. La polémica se intensifica en medio de un clima político donde demócratas y sectores del propio partido del expresidente exigen mayor claridad sobre la naturaleza y alcance de esta relación.
Este nuevo capítulo en la investigación pone en el centro del debate la responsabilidad y el papel de figuras públicas en casos de abuso y explotación. La presión por la publicación del informe completo y la apertura de documentos clave refleja un clamor por justicia y transparencia en un tema que ha sacudido la opinión pública a nivel internacional.