Los residentes de varios sectores en Santo Domingo Este (SDE) enfrentan apagones que duran más de 12 horas diarias, generando malestar y pérdidas económicas en la comunidad. Según denuncian, la energía se va en la mañana y solo regresa en la tarde o casi noche, lo que afecta gravemente la vida cotidiana y los negocios locales.
Los moradores expresaron su frustración porque, a pesar de no recibir el servicio eléctrico de manera continua, las facturas llegan cada vez más elevadas, llegando a montos de 5,000 a 6,000 pesos y más. Aseguran que sus reclamos en las oficinas de la empresa eléctrica han sido ignorados, sin que ninguna solución concreta llegue.
La falta de electricidad ha provocado daños en productos perecederos, especialmente en comercios como comedores y tiendas de alimentos, donde carnes, embutidos y otros productos se han perdido debido a los constantes cortes. Además, el vaivén de la luz ha afectado equipos eléctricos, incrementando las pérdidas para los dueños de negocios.
Ante la situación insostenible, los residentes organizaron una protesta la noche anterior, bloqueando la avenida principal de la zona para exigir respuestas y una solución inmediata a los cortes prolongados que afectan sus hogares y trabajos.
La situación ha generado un creciente clima de tensión y desesperación entre los moradores, quienes temen que la problemática se agrave en los próximos meses si no reciben una respuesta efectiva. Muchos comentan que el acceso irregular a la electricidad limita sus actividades diarias, desde el estudio de los niños hasta el trabajo desde casa, y pone en riesgo la salud de personas vulnerables como ancianos y enfermos.
Las autoridades locales y la empresa distribuidora de electricidad aún no han emitido un comunicado oficial sobre las causas de estos cortes prolongados ni sobre las medidas que tomarán para resolver el problema. Mientras tanto, la comunidad continúa esperando soluciones y prepara nuevas movilizaciones para exigir un servicio eléctrico estable y justo.
