El Papa León XIV expresó su profundo pesar y solidaridad con las familias afectadas por las graves inundaciones que azotaron el condado de Kerr, en Texas, causando la muerte de al menos 80 personas, incluyendo 27 niños. En su mensaje oficial, el Pontífice mostró especial preocupación por las víctimas del campamento cristiano Camp Mystic, donde muchas niñas perdieron la vida.

Durante su discurso tras el rezo del Ángelus, el Papa manifestó: “Quisiera expresar mis más sinceras condolencias a todas las familias que han perdido a sus seres queridos, en particular a las niñas que se encontraban en el campamento de verano. Rezamos por ellas y por quienes están desaparecidos”. Estas palabras reflejan la cercanía y apoyo espiritual del líder de la Iglesia Católica a los afectados.

Las lluvias torrenciales provocaron una crecida repentina del río Guadalupe, elevándose cerca de ocho metros en menos de una hora, lo que arrasó con tiendas de campaña, cabañas y viviendas. El campamento, tradicional punto de encuentro para familias texanas, fue devastado, dejando decenas de desaparecidos y heridos.

Las autoridades locales continúan las labores de búsqueda y rescate para localizar a las personas desaparecidas, entre ellas 11 niñas y una consejera del campamento. Equipos de emergencia trabajan día y noche, mientras la comunidad local y religiosa se unen para brindar apoyo y consuelo a los afectados.

El Papa León XIV, primer pontífice estadounidense en la historia, fue elegido en mayo de 2025. Su mensaje de condolencias marca una muestra de cercanía ante esta tragedia que ha conmovido no solo a Texas, sino a todo el mundo. Después de su intervención, el Papa se retiró a su residencia en Castel Gandolfo para un breve descanso.

Mientras tanto, figuras públicas y autoridades internacionales han expresado su solidaridad y apoyo a las víctimas. La ex primera dama Laura Bush y el expresidente George W. Bush destacaron el valor de los equipos de rescate y llamaron a la unidad y esperanza para superar este duro momento.