Cinco nuevas aeronaves Dulus TP-75, diseñadas y ensambladas en República Dominicana, se suman oficialmente a las operaciones de defensa y patrullaje de la Fuerza Aérea Nacional. Estas aeronaves, capaces de realizar maniobras de entrenamiento militar y misiones silenciosas, patrullan ya la zona fronteriza del país como parte del esfuerzo por reforzar la seguridad nacional y combatir el narcotráfico en áreas estratégicas.

Inspirados en modelos de alto rendimiento como el Tucano, los Dulus TP-75 han participado en ferias aeronáuticas internacionales, incluyendo un destacado vuelo hasta Chile en 2024, donde recorrieron más de 4,000 millas con bajo consumo de combustible. Actualmente, dos de estos aviones vigilan activamente la frontera norte-sur, y se prevé que para diciembre estén operativos un total de diez aeronaves.

El proceso de ensamblaje, realizado por 20 técnicos dominicanos especializados, toma cerca de dos meses por unidad e implica la instalación de más de 5,000 piezas. El viceministro de Asuntos Aéreos y Espaciales, Carlos Febrillet, destacó que una vez satisfecha la demanda local, la meta es exportar estas aeronaves a países que ya han mostrado interés.

Paralelo a esta iniciativa, el Instituto Dominicano de Aviación Civil desarrolla un proyecto de señalización e iluminación en la pista de aterrizaje de la Fuerza Aérea, con una inversión de RD$175 millones. Este esfuerzo complementa el fortalecimiento tecnológico y logístico de la defensa aérea del país.

El presidente Luis Abinader supervisó personalmente los avances del proyecto este martes, acompañado de altos mandos militares y medios de comunicación. La incorporación de los Dulus TP-75 marca un hito en la industria aeronáutica dominicana y proyecta al país como potencial exportador de tecnología militar en el continente.

Los Dulus TP-75 no solo representan un avance en materia de seguridad nacional, sino también un símbolo del potencial tecnológico e industrial de República Dominicana. Su fabricación local impulsa la generación de empleos especializados y coloca al país en el mapa de la innovación aeroespacial en América Latina, abriendo las puertas a futuras alianzas internacionales.

Además, el reforzamiento de la infraestructura aeroportuaria, como el desarrollo de un aeropuerto alterno para operaciones militares y de emergencia, mejora la capacidad operativa de la Fuerza Aérea y eleva los estándares de seguridad aérea. Estas acciones reflejan el compromiso del Gobierno dominicano con una defensa más moderna, eficiente y fabricada con talento nacional.