Santo Domingo.– La mañana de este miércoles se confirmó un tiroteo ocurrido en el segundo piso del restaurante MG Kitchen, ubicado en la avenida Gustavo Mejía Ricart, que dejó un saldo de una persona muerta y otra herida de gravedad. El vocero de la Policía Nacional, coronel Diego Pesqueira, reveló los primeros detalles del incidente durante una entrevista radial.

La víctima mortal fue identificada como Alexander Pilier, conocido en redes sociales como “Alex W” o “Alex Hierba”, un joven de 30 años, emprendedor vinculado al mundo del entretenimiento urbano. El herido fue identificado como Willard Castro Collado, de 23 años, quien se encuentra bajo observación médica.

El presunto agresor, identificado como José Alexander de los Santos, alias “Ale Paquete”, fue detenido en el lugar por agentes de la Policía Nacional y está siendo investigado por el Departamento de Homicidios.

Aunque se manejaban versiones que relacionaban a un influencer extranjero con el hecho, Pesqueira desmintió esta información y confirmó que todos los involucrados son de nacionalidad dominicana.

Según informaciones extraoficiales, el tiroteo se habría originado por un conflicto que se arrastraba desde otro lugar, posiblemente relacionado con un evento de entretenimiento celebrado la noche anterior. Sin embargo, las autoridades aún investigan los motivos exactos del altercado.

El hecho ha causado preocupación en la comunidad debido a que este no es el primer incidente violento registrado en ese mismo establecimiento. En septiembre de 2022, un suceso similar dejó un muerto y dos heridos.

La Policía Nacional continúa las investigaciones en coordinación con el Ministerio Público, mientras el establecimiento permanece bajo observación por parte de las autoridades forenses y de seguridad.Este nuevo episodio de violencia ha reavivado el debate sobre la seguridad en centros de diversión ubicados en zonas urbanas concurridas, especialmente aquellos frecuentados por públicos nocturnos.

Vecinos y ciudadanos exigen mayor control por parte de las autoridades, incluyendo la implementación de medidas como detectores de metales y mayor presencia policial en horarios críticos, para evitar que estos espacios se conviertan en escenarios recurrentes de ajustes de cuentas o conflictos personales.