Santo Domingo. – Los beneficios del Seguro Nacional de Salud (SeNaSa) han experimentado una caída de más de RD$2,105 millones en los últimos dos años, según reveló la periodista Altagracia Salazar en su análisis de los estados financieros de la entidad. Esta disminución plantea serias preocupaciones sobre la sostenibilidad del sistema público de salud y la calidad del servicio que reciben millones de afiliados.
Salazar explicó que en 2021 SeNaSa reportó beneficios por RD$3,195 millones, mientras que en 2023 esa cifra se redujo a RD$1,090 millones. Esta pérdida sostenida coincide con un aumento en los costos de atención, la falta de revisión de las tarifas de servicios médicos y presiones financieras derivadas de una mayor demanda en el régimen subsidiado.
Según la periodista, esta caída no solo evidencia una gestión menos eficiente, sino que también pone en riesgo la capacidad operativa de la institución para responder a los compromisos con clínicas, médicos y proveedores de servicios. A pesar del crecimiento en el número de afiliados, los ingresos no están compensando los gastos crecientes, lo que podría afectar la calidad del servicio.
Organizaciones de la sociedad civil y expertos en salud han advertido que esta tendencia podría generar un deterioro progresivo en el acceso a medicamentos, estudios diagnósticos y atenciones especializadas. También se teme que esta reducción de beneficios limite las posibilidades de ampliar la cobertura a sectores vulnerables que dependen exclusivamente del régimen subsidiado.
Salazar pidió mayor transparencia en el manejo financiero de SeNaSa y que se expliquen públicamente las razones detrás de esta caída. Además, instó a las autoridades a presentar un plan de recuperación que contemple reformas estructurales, mejoras en la supervisión del gasto y una revisión de los pagos por servicios prestados.
Esta situación ocurre en un contexto en el que el sistema de salud enfrenta múltiples desafíos, desde el desbordamiento en los hospitales hasta las quejas recurrentes de usuarios por servicios deficientes. La reducción de los beneficios de SeNaSa podría agravar aún más el panorama si no se toman medidas urgentes para corregir el rumbo financiero de la institución.
