Sonkajärvi, Finlandia. – Con cascos, fuerza y mucho equilibrio, decenas de parejas se lanzan hoy a la aventura en el singular Campeonato Mundial de Porteo de Parejas (Eukonkanto), una competición tan exigente como divertida que se celebra desde 1992 en el pequeño pueblo de Sonkajärvi, en la región de Savonia Septentrional.
El evento, que se extenderá hasta mañana, atrae a participantes de todo el mundo que compiten por un premio muy particular: el peso de la mujer… en cerveza.
La prueba consiste en que el hombre debe cargar a su compañera —de al menos 49 kg o con peso añadido en una mochila si no alcanza— a lo largo de una pista oficial de 253,5 metros, con obstáculos que incluyen vallas, zanjas de arena y un tramo de agua de un metro de profundidad.
La competición no exige vínculos legales: basta con que la mujer tenga 17 años o más, y los estilos de porteo aceptados incluyen el “estilo estonio”, donde la mujer cuelga boca abajo con las piernas sobre los hombros del portador.
Más allá del humor que despierta la escena, los organizadores destacan que el evento es una verdadera prueba de trabajo en equipo, resistencia y confianza mutua, y que los participantes deben contar con seguro propio. Solo se permite el uso de casco para la mujer y cinturón para el hombre durante la carrera.
Aunque el campeonato tiene reglas oficiales establecidas por un comité internacional, el Eukonkanto ha cruzado fronteras y se ha celebrado en países como Alemania, Australia, Estonia, India, Reino Unido y Suecia, con ligeras variaciones.
La tradición se remonta —según la leyenda— a un bandido del siglo XIX conocido como Herman “Ronkainen el Ladrón”, quien hacía cargar a sus seguidores con sacos o incluso mujeres robadas de las aldeas como prueba de fuerza y velocidad. Hoy, esta leyenda se transforma en una colorida celebración de pareja, humor y, por supuesto, cerveza. ¡Kippis!