Rusia condena ataque contra Irán y lo califica de “agresión absolutamente no provocada”.

Moscú. El presidente de Rusia, Vladímir Putin, expresó su firme rechazo al reciente ataque contra Irán, calificándolo como una “agresión absolutamente no provocada”, y aseguró que carece de todo fundamento o justificación desde el punto de vista del derecho internacional.

Durante una declaración oficial, Vladímir manifestó su solidaridad con el pueblo iraní y afirmó que su gobierno está realizando esfuerzos para brindar asistencia en medio de la crisis. “Estamos haciendo esfuerzos para ayudar al pueblo iraní. Les pido que envíen mis mejores deseos al presidente de Irán y al líder religioso supremo del país”, expresó.

El Kremlin subrayó que su posición ha sido expuesta de manera clara y contundente a través del Ministerio de Asuntos Exteriores y en el seno del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde Rusia ha mantenido una postura crítica frente a las acciones militares recientes.

La declaración refuerza el posicionamiento de Moscú como uno de los principales aliados políticos de Teherán, en un contexto regional cada vez más tenso y con implicaciones geopolíticas de amplio alcance. Rusia instó a la comunidad internacional a respetar la soberanía de Irán y abogar por la desescalada del conflicto.

Tensión mundial tras ataque de EE.UU. a Irán

El reciente ataque militar de Estados Unidos contra Irán ha generado una ola de tensión a nivel internacional, al ser considerado por varios países como una agresión unilateral y no provocada. La operación, que incluyó el uso de aviones B2, submarinos y bombas de gran capacidad, tuvo como blanco supuestas instalaciones de enriquecimiento de uranio en Fordo, Natanz y Fazán.
Washington justificó el ataque como una medida para frenar el desarrollo del programa nuclear iraní, aunque sectores críticos aseguran que no existen pruebas concluyentes de que Irán estuviera violando acuerdos internacionales en ese ámbito.

Tras el bombardeo, Irán reaccionó con firmeza, logrando que su Parlamento aprobara el cierre del estratégico estrecho de Ormuz, por donde transita aproximadamente el 20 % del petróleo mundial. Esta decisión provocó una reacción inmediata en los mercados internacionales, elevando el precio del crudo en más de un 4 %.

La comunidad internacional observa con preocupación el agravamiento del conflicto, mientras voces como la del gobierno ruso califican la ofensiva estadounidense como “injustificada y sin fundamento”. La situación mantiene al Medio Oriente en un delicado equilibrio, con el temor latente de una escalada mayor.