Julio Alberto Martínez: “Lula y Abinader en Cumbre Brasil-Caribe activan esperanza regional para reconstrucción de Haití”.
El comunicador Julio Alberto Martínez calificó como “el acontecimiento geopolítico más importante de la región” la reciente Cumbre Brasil-Caribe, celebrada en Brasilia, en la que participaron el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y el mandatario dominicano Luis Abinader, junto a líderes del Caribe, y que abordó temas cruciales como el cambio climático, la inseguridad alimentaria y la situación de Haití.
Martínez valoró el liderazgo compartido de Abinader y Lula en la Cumbre Brasil-Caribe, señalando que ambos presidentes colocaron en el centro del debate regional la crisis estructural que afecta a Haití. En ese contexto, resaltó el compromiso de Brasil de donar más de 290 millones de dólares a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para proyectos de alimentación escolar, infraestructura hospitalaria y vial, así como para la capacitación de 400 policías haitianos.
“Esta cumbre Brasil-Caribe ha configurado un mini Plan Marshall para Haití. Un esfuerzo concreto y sin precedentes en los últimos años para rescatar a ese país del caos institucional y del hambre que afecta a más del 80 % de su población”, aseguró el analista político.
Asimismo, Martínez destacó que Brasil, como potencia exportadora de alimentos y con experiencia en programas de combate al hambre, tiene la capacidad de liderar este tipo de iniciativas. Recordó que el propio Lula presentó ante el G7 un plan global de erradicación del hambre, lo que refuerza su legitimidad en este esfuerzo humanitario y estratégico.
El comunicador también valoró el enfoque integral de la cumbre Brasil-Caribe, al incluir compromisos en infraestructura marítima, aérea y terrestre, así como inversiones que podrían beneficiar no solo a Haití, sino también a la estabilidad de toda la región. “Brasil está reconstruyendo su rol como potencia regional y mundial, y esta cumbre lo confirma”, puntualizó.
Sin embargo, Martínez advirtió que todo dependerá de que Haití logre reconstruir una infraestructura institucional mínima que permita gestionar y ejecutar los fondos. “El liderazgo haitiano tiene ahora la responsabilidad histórica de no desperdiciar esta oportunidad”, expresó.
El apoyo del presidente Abinader a una fuerza híbrida de paz en Haití, promovida por la ONU y respaldada por Brasil, fue otro de los puntos elogiados por Martínez, quien consideró que esta podría ser la primera luz real al final del túnel para un país sumido en el colapso.