Consuelo Despradel, calificó como un “fracaso” la reciente cumbre del Grupo de los Siete (G7), señalando que los acuerdos alcanzados no han logrado resolver los conflictos internacionales más críticos. Durante su intervención en el programa “El Gobierno de la Mañana” de ZOL FM, Despradel expresó su preocupación por la creciente tensión en diversas regiones del mundo y la falta de acciones concretas por parte de las principales potencias.

Despradel destacó que, a pesar de los esfuerzos diplomáticos, la situación en Ucrania, las relaciones entre Estados Unidos e Irán, y la crisis en Gaza continúan sin una solución efectiva. “El G7 ha demostrado ser incapaz de generar consensos que detengan la escalada bélica”, afirmó, subrayando que la falta de unidad entre las naciones más poderosas está exacerbando los conflictos en lugar de mitigarlos.

Además, la comunicadora advirtió sobre los riesgos de una posible guerra mundial, señalando que las tensiones actuales podrían desencadenar un conflicto de mayor escala si no se toman medidas urgentes. “Estamos al borde de una guerra mundial”, concluyó, haciendo un llamado a la comunidad internacional para que priorice la diplomacia y la cooperación sobre los intereses geopolíticos.

Para Despradel, la cumbre también evidenció una falta de compromiso real con los desafíos económicos globales, como la inflación y la crisis energética, que afectan principalmente a los países en desarrollo. Considera que estas omisiones reflejan una desconexión entre las prioridades de los líderes del G7 y las necesidades urgentes de la población mundial.

Finalmente, enfatizó que la comunidad internacional debe replantear sus estrategias y fortalecer los mecanismos multilaterales para evitar que el mundo caiga en un periodo prolongado de inestabilidad y confrontación. Según Despradel, solo a través de un diálogo sincero y una acción conjunta podrá lograrse un verdadero avance hacia la paz y el bienestar global.

Asimismo, Consuelo Despradel hizo un llamado a los medios de comunicación para que jueguen un papel más responsable y crítico en la difusión de información sobre estos temas, fomentando un debate público informado que presione a los líderes a actuar con transparencia y responsabilidad.