El comunicador Dany Alcántara afirmó que el presidente Luis Abinader está implementando una estrategia para regular y ordenar el proselitismo dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM). Según Alcántara, esta iniciativa busca evitar el uso indebido de recursos del Estado en actividades proselitistas y garantizar que los funcionarios públicos se aparten de sus funciones gubernamentales al momento de realizar actividades políticas. El presidente Abinader ha sido enfático en que no permitirá el proselitismo en actos oficiales del gobierno, como lo expresó el vicepresidente del PRM, Eddy Olivares.
Esta estrategia también se enmarca en un contexto de lucha interna dentro del PRM por la candidatura presidencial para las elecciones de 2028, donde al menos diez dirigentes han mostrado interés en competir. Abinader busca consolidar su posición para evitar divisiones que puedan debilitar al partido. La modificación del Artículo 124 de la Constitución podría facilitar su postulación a una reelección; sin embargo, él sostiene que su intención “es brindar estabilidad a la sociedad dominicana”.
Alcántara también destacó que el presidente está utilizando espacios como “La Semanal” para establecer una agenda directa con la prensa y mantener su presencia en la opinión pública. Sin embargo, críticos argumentan que este enfoque podría ser una estrategia mediática para consolidar su imagen y evitar cuestionamientos sobre sus verdaderas intenciones. La comunidad política y la ciudadanía observan de cerca estos movimientos, que podrían tener un impacto significativo en el panorama electoral del país.
Además, Dany Alcántara resaltó que esta estrategia busca también controlar la dispersión y competencia interna dentro del PRM, que ha generado tensiones entre distintos sectores del partido. Según el comunicador, ordenar el proselitismo contribuirá a evitar confrontaciones abiertas y a mantener una imagen de unidad en vísperas de los comicios.
Por otro lado, Alcántara advirtió que, aunque Abinader promueva esta regulación, persisten dudas sobre la efectividad de la medida, dado que algunos dirigentes continúan con prácticas proselitistas fuera del control centralizado. Por ello, señaló la necesidad de acompañar esta estrategia con sanciones claras y una vigilancia constante para asegurar su cumplimiento real dentro del partido.