China critica a EE.UU. por cancelar visas a estudiantes internacionales.
Pekín manifestó este miércoles su preocupación por la reciente decisión del gobierno de Estados Unidos de suspender la tramitación de visas para estudiantes extranjeros y participantes en programas de intercambio.
Según un documento interno del Departamento de Estado, citado por la agencia AFP, se ordenó a embajadas y consulados detener temporalmente la emisión de estas visas mientras se esperan nuevas directrices, que incluirán un examen más riguroso de las redes sociales de los solicitantes. China calificó la medida como un obstáculo injustificado a la cooperación académica y pidió a Washington “garantizar concretamente los derechos e intereses legítimos de los estudiantes internacionales, incluidos los estudiantes chinos”.
La medida se produce en medio del endurecimiento de las políticas migratorias impulsadas tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, y en un contexto de creciente tensión ideológica entre EE.UU. y China. Además de cancelar cientos de visas, las autoridades estadounidenses han arrestado a estudiantes extranjeros involucrados en protestas propalestinas, y amenazado con su expulsión, incluso si estaban legalmente en el país.
En paralelo, la Universidad de Harvard se ha convertido en un blanco del gobierno, que la acusa de mantener vínculos con el Partido Comunista Chino y de fomentar ideologías progresistas. La administración ha propuesto vetar la presencia de estudiantes extranjeros en la institución, que actualmente representan el 27% de su matrícula, así como poner fin a los contratos federales con la universidad.
China ha expresado su firme rechazo a la reciente decisión de Estados Unidos de suspender temporalmente la tramitación de visas para estudiantes internacionales, medida que incluye la implementación de un control más estricto de las redes sociales de los solicitantes. La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Mao Ning, instó a Washington a “salvaguardar eficazmente los derechos e intereses legítimos de todos los estudiantes internacionales, incluidos los estudiantes chinos”, subrayando que la cooperación educativa no debe politizarse ni interrumpirse arbitrariamente.
La administración Trump ha intensificado su escrutinio sobre los estudiantes extranjeros, revocando cientos de visas y suspendiendo nuevas entrevistas para visas de estudiantes y programas de intercambio (categorías F, M y J), mientras se revisan los procedimientos de verificación de antecedentes. Estas acciones han generado preocupación en la comunidad académica internacional, ya que podrían afectar negativamente la reputación de Estados Unidos como destino educativo y limitar las oportunidades de intercambio académico y cultural.