Santo Domingo — A más de 60 años del ajusticiamiento del dictador Rafael Leonidas Trujillo, familiares de quienes participaron en su derrocamiento expresaron su preocupación por el creciente desconocimiento histórico entre las nuevas generaciones sobre uno de los capítulos más oscuros del país. Señalan que gran parte de la juventud desconoce los hechos ocurridos antes de 1930 y durante los 31 años de la tiranía trujillista.

“Entiendo que cerca del 65% de la población tiene menos de 64 años y no vivió la dictadura. Esa población no conoce la historia de Trujillo porque no está contada en los libros de texto, ni ha sido narrada debidamente”, afirmaron durante un acto conmemorativo por el Día de la Libertad. La fecha, instaurada mediante el decreto 335-21 del presidente Luis Abinader, recuerda el 30 de mayo de 1961, cuando fue ajusticiado el tirano.

Los familiares también respondieron a quienes, ante la inseguridad actual del país, expresan nostalgia por la mano dura del trujillismo. “Desde 1961 conseguimos lo que nos faltaba hasta ese día: la libertad. Podemos expresarnos libremente, como lo estamos haciendo ahora”, señalaron con firmeza.

Durante el evento se rindió homenaje a figuras clave del complot como Antonio de la Maza, Pedro Livio Cedeño y el general Tomás Imbert Barrera, reconociendo su valentía como inspiración ética y patriótica. Además, el presidente Abinader emitió este viernes el decreto 288-25 que declara héroe nacional a Juan Rodríguez García, conocido como Juancito Rodríguez, por su ejemplar lucha contra la tiranía.

Diversas entidades civiles y académicas insisten en la necesidad de incluir esta parte de la historia en los programas escolares, para que las nuevas generaciones comprendan el alto precio de la libertad conquistada.

Expertos en educación y derechos humanos advierten que el vacío histórico en la enseñanza formal deja espacio para idealizaciones peligrosas del pasado. “Cuando no se conoce la historia, se corre el riesgo de repetirla o, peor aún, de glorificarla sin entender su crueldad”, explicó un representante del Museo Memorial de la Resistencia Dominicana. También señalaron que muchos jóvenes solo escuchan de Trujillo a través de anécdotas familiares o redes sociales, lo que distorsiona el verdadero impacto de su régimen autoritario.

En ese sentido, distintas organizaciones sociales y académicas llamaron al Ministerio de Educación a revisar los contenidos curriculares y garantizar que la historia reciente, incluyendo la dictadura de Trujillo y la lucha por la democracia, sea enseñada con profundidad y rigor. “Recordar es una forma de resistir el olvido”, señalaron, insistiendo en que preservar la memoria colectiva es una responsabilidad de todos.