Donald Trump y el cantante Kid Rock han anunciado una iniciativa conjunta para combatir la reventa abusiva de boletos en la industria musical. La problemática, que afecta a millones de fanáticos y artistas, ha sido motivo de críticas debido a los altos costos y la intervención de bots en la compra masiva de entradas.
“Cualquiera que haya comprado una entrada para un concierto en la última década sabe lo frustrante que es. Compras un boleto por 100 dólares, pero cuando terminas de pagar, te cuesta 170. Luego, los bots se apoderan de las mejores entradas y las revenden con márgenes de hasta un 500%”, expresó Kid Rock.
El cantante enfatizó que los artistas no reciben ningún beneficio de estas prácticas y que es necesario establecer regulaciones para garantizar que los boletos lleguen a los verdaderos fanáticos a precios justos. “Me encantaría que en el futuro hubiera alguna legislación que ponga un límite a la reventa de entradas. Han probado esto en Europa y ha funcionado. Es la única forma de que podamos asegurarnos de que las entradas lleguen a quienes realmente quieren disfrutar de la música“, agregó.
Por su parte, Trump elogió el compromiso de Kid Rock con la causa y destacó la importancia de abordar el problema. “Bob (Kid Rock) siempre ha estado interesado en ayudar a los fanáticos. Ha hablado de esto por años y sabe lo injusto que es ver un boleto de 100 dólares revendiendo por 2,000 la noche siguiente“, afirmó el exmandatario.
La iniciativa ha sido bien recibida por la comunidad artística, que desde hace tiempo ha manifestado su preocupación por el impacto de la reventa en los precios y el acceso a los eventos en vivo. Se espera que este sea el primer paso hacia una regulación más estricta del mercado de boletos en Estados Unidos.
