Santo Domingo – Imbert Brugal afirmó que las recientes medidas anunciadas por el presidente Luis Abinader en temas de seguridad, migración e inteligencia son una respuesta desesperada para evitar nuevas manifestaciones como la ocurrida en Friusa la semana pasada.

Brugal considera que el Gobierno ha reaccionado de manera improvisada y tardía, aparentemente presionado por la opinión pública y el auge de las redes sociales, que han viralizado críticas hacia el manejo de la migración irregular. “De repente nos despertó el patriotismo”, ironizó, aludiendo a lo que él describe como una puesta en escena con fines políticos.

Hay algo detrás, una agenda, una mano meciendo la cuna”, dijo, sugiriendo que las decisiones del Ejecutivo podrían estar influenciadas por factores internos y externos, incluyendo posibles presiones internacionales y estrategias para contener protestas convocadas para el 24 de abril.

Entre las medidas tomadas por el Gobierno figuran el despliegue de 1,700 efectivos militares adicionales para reforzar el control migratorio y operativos intensivos en zonas como Friusa, que se ha convertido en un símbolo del conflicto.

Brugal también criticó la forma en que se ha tratado el problema de los trabajadores extranjeros irregulares, afirmando que sectores económicos y políticos han sido cómplices durante años.

El problema no es la guardia. El problema es el liderazgo político y empresarial que permite estas prácticas”, sentenció.

A juicio del comunicador, si bien algunas medidas como el aumento de vigilancia o la fiscalización en sectores clave pueden ser positivas, el momento y la manera en que se han presentado demuestran más un interés en controlar la opinión pública que en resolver la crisis de fondo.

Ganaron ellos”, concluyó, refiriéndose a los grupos que organizaron la protesta de Friusa y que, según Brugal, forzaron al gobierno a actuar.