Viena — Austria endurece su lucha contra el acoso sexual digital: el envío no consentido de imágenes de penes será considerado un delito penal. Así lo anunció este miércoles la ministra de Justicia, Anna Sporrer, quien aseguró que este tipo de comportamiento “no es una ofensa trivial, sino una forma de violencia sexual que genera ira, vergüenza e impotencia en las víctimas”. La nueva norma incluirá todos los medios tecnológicos, desde mensajes instantáneos hasta el uso de funciones como AirDrop o Bluetooth.
La enmienda al código penal, que será debatida en el Consejo de Ministros, surge como parte de un plan nacional contra la violencia hacia las mujeres, basado en directrices del Consejo de Europa y de la UE. “Muchas veces, la violencia comienza de forma aparentemente inofensiva, y queremos actuar antes de que escale”, afirmó Sporrer. El simple hecho de estar en una app de citas no será excusa: el consentimiento debe ser claro y explícito.
Con 25 feminicidios registrados en 2024, Austria refuerza su política de tolerancia cero ante la violencia de género. “Las niñas y mujeres deben poder vivir sin miedo. Esto no se trata solo de justicia penal, sino de dignidad, respeto y seguridad para todas”, enfatizó la ministra.
