Las estafas a través de mensajes de texto han alcanzado niveles alarmantes en EE.UU., con miles de consumidores siendo víctimas de fraudes cada día. Según la Comisión Federal de Comercio, en 2024 los consumidores reportaron pérdidas superiores a los 470 millones de dólares por este tipo de estafas, una cifra cinco veces mayor que la reportada en 2020.

Los estafadores están utilizando métodos cada vez más sofisticados para atraer a las víctimas. Mensajes aparentemente inofensivos, que provienen de números desconocidos o aplicaciones legítimas como Amazon, prometen ofertas de trabajo o alertas de entregas de paquetes, pero son simplemente trampas para robar información personal o dinero. Valentina López, una de las víctimas, contó cómo recibió un mensaje de texto que comenzaba con: “Hola soy Elin, yo sé que no te acuerdas de mí, pero yo sí de ti”. Sin dudar, bloqueó el número al reconocer que se trataba de un intento de estafa.

Estas estafas se presentan de diversas maneras: desde solicitudes falsas de inversión hasta alertas sobre problemas con entregas, fraudes bancarios, peajes no pagados, o incluso un supuesto fraude relacionado con una compra sospechosa. “Nunca hagas clic en esos enlaces“, advierte la Comisión Federal de Comercio, que también recomienda reportar estos mensajes y bloquear los números involucrados.

Las autoridades instan a los consumidores a ser escépticos ante ofertas demasiado buenas para ser verdad y a verificar cualquier comunicación directamente con las empresas involucradas. Si bien las estafas por texto se han vuelto comunes, la prevención y la conciencia son clave para evitar caer en ellas.