Las autoridades locales están intensificando las investigaciones para esclarecer las circunstancias de la muerte del joven John Connor Reyes, de 22 años, un caso que se ha tornado cada vez más complejo y preocupante para su familia y la comunidad.

Según informaron sus familiares, Reyes fue detenido por la policía durante un operativo en el barrio El Hoyo, en el sector Enriquillo de Herrera, el 20 de febrero a eso de las 2:00 a.m. Sin embargo, ocho días después, su cuerpo fue encontrado muerto y casi en descomposición en la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en la zona universitaria.

El joven, quien componía y cantaba música urbana, se dedicaba a lavar vehículos para sostenerse. Sus parientes han expresado su sospecha de que John fue objeto de tortura, ya que aseguran que no padecía ninguna enfermedad que pudiera justificar su muerte. “Desde el mismo día que lo llevaron los policías, sospechamos que algo grave había ocurrido. Ellos lo tiraron muerto a las 3:00 a.m. en Gombe, y unos días después nos informaron que él estaba muerto en el INACIF”, relató un familiar del joven.

El caso se ha tornado aún más confuso cuando se descubrió que no hay registro de su arresto en ninguna estación policial del municipio. Después de una semana de búsqueda sin éxito en los destacamentos de las Caobas, las autoridades finalmente informaron que Reyes había sido trasladado al hospital municipal de Gombe, donde habría fallecido en circunstancias extrañas. Al día siguiente, su cadáver fue enviado al INACIF.

El director de la Policía Nacional, Mayor General Ramón Antonio Guzmán Peralta, ordenó la suspensión de seis agentes de la uniformada, entre ellos un militar y dos policías que integraban la patrulla involucrada en el incidente. Estos agentes están siendo investigados a fondo para determinar las causas de la muerte del joven Reyes.

“Nosotros, como vecinos y familiares, lo que queremos es que este caso se esclarezca. Si hubo un culpable, que pague, y si fue una muerte natural, no habrá ningún problema. Pero si hubo abuso, exigimos justicia”, manifestaron los parientes del joven.

La situación genera gran preocupación en la comunidad, quienes exigen que las investigaciones se mantengan rigurosas y que los responsables, si los hay, sean llevados ante la justicia. Los familiares de John CT Reyes han advertido que no se darán por vencidos hasta que la verdad sobre lo sucedido sea revelada.

Este caso sigue siendo un tema de gran interés público y las autoridades aseguran que se están tomando todas las medidas necesarias para esclarecer los hechos lo antes posible.