El Paso, Texas – Patrick Crusius, el hombre que en 2019 llevó a cabo un ataque racista contra compradores hispanos en un Walmart de El Paso, evitando la pena de muerte tras un acuerdo con la Fiscalía. El ataque dejó 23 personas muertas y 22 heridas, convirtiéndose en una de las masacres más mortales en la historia de Estados Unidos.
El fiscal de distrito del condado de El Paso, James Montoya, anunció este martes que la decisión de no solicitar la pena capital se tomó en consideración de la mayoría de los familiares de las víctimas, quienes deseaban cerrar el caso.
Crusius, de 26 años, había conducido cientos de kilómetros hasta la frontera entre Estados Unidos y México con la intención de llevar a cabo el atentado, motivado por ideas supremacistas que publicó en línea antes de abrir fuego.
El giro en el caso se produce después de años de litigios, durante los cuales los fiscales federales ya habían asegurado una sentencia de cadena perpetua para el acusado en un juicio anterior. Con este acuerdo, se evita un juicio prolongado y un proceso de apelaciones que podría haber durado décadas.
A pesar de la decisión de la Fiscalía local, el caso ha reavivado el debate sobre los crímenes de odio y la violencia armada en Estados Unidos. Organizaciones defensoras de los derechos civiles han subrayado la importancia de reforzar medidas contra el extremismo, mientras que algunos familiares de las víctimas han expresado su descontento con la decisión de retirar la pena de muerte.
Crusius enfrentará su sentencia formal en los próximos días, en la que se espera que reciba múltiples cadenas perpetuas sin posibilidad de libertad condicional.