Este miércoles se llevará a cabo una audiencia en la que el juez federal Dale Ho abordará la decisión del Departamento de Justicia de retirar los cargos de corrupción contra el alcalde de Nueva York, Eric Adams. La orden, emitida el pasado viernes, ha provocado una oleada de protestas y renuncias de fiscales, funcionarios de alto rango y miembros del gobierno local.
La moción del Departamento de Justicia, que busca retirar el caso de corrupción que involucra al alcalde demócrata, ha generado controversia. En respuesta a esta decisión, tres ex fiscales federales presentaron un escrito ante el juez Ho, pidiendo una investigación exhaustiva sobre si la orden del gobierno obedece a un interés público legítimo o si se trata de un intento para que Adams coopere con las políticas migratorias de la administración de Donald Trump.
La controversia aumentó después de la filtración de un memorando interno del Departamento de Justicia, en el que Emil Bove, número dos de la institución, ordenaba a los fiscales abandonar el caso, argumentando que interfería con su trabajo en temas de inmigración. Bove mencionó que Adams no podría dedicar la atención y recursos necesarios a la inmigración ilegal y a los delitos violentos si seguía adelante con el caso, haciendo alusión a las políticas de deportación masiva prometidas por el entonces presidente Trump.
Tras la filtración, el alcalde Adams se reunió con Tom Homan, zar de la frontera de la administración Trump, y anunció que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) podrá regresar a la cárcel municipal de Rikers, una medida que ha aumentado aún más las especulaciones sobre posibles favores políticos a cambio de la retirada de los cargos.
La audiencia de mañana se perfila como crucial para esclarecer si la retirada de cargos tiene motivaciones políticas o si responde a un verdadero interés por el bienestar público.