Este jueves, Amazon enfrenta su primera huelga significativa a menos de una semana de Navidad, con alrededor de 10,000 trabajadores afiliados al sindicato Teamsters que han abandonado sus puestos en siete instalaciones en cuatro estados distintos de Estados Unidos. Los puntos críticos incluyen Nueva York, Atlanta, el sur de California en San Francisco y Skokie, Illinois.
La huelga comenzó a las 6 de la mañana en estas localidades, en un momento en que Amazon intensifica sus operaciones para satisfacer la alta demanda de entregas navideñas. Pese a esto, la compañía asegura que no afectará significativamente a las entregas programadas para las festividades.
El sindicato Hermandad Internacional de Camioneros (Teamsters) ha expresado su descontento con Amazon, afirmando que la compañía ha ignorado los plazos para la negociación del convenio laboral y ha mantenido su postura en contra de mejorar las condiciones laborales de sus trabajadores. Sean M. O’Brien, presidente de Teamsters, comentó que “si su paquete se retrasa durante las vacaciones, es culpa de la insaciable codicia de Amazon”, en un comunicado de prensa.
Los empleados que se han unido a la huelga incluyen trabajadores de almacenes y conductores, quienes aseguran ser tratados como si fueran empleados externos a pesar de llevar uniformes de Amazon, conducir vehículos de Amazon y entregar exclusivamente paquetes de la empresa.
Aunque el sindicato representa a solo el 1% de los 1,5 millones de empleados de Amazon en Estados Unidos, la huelga ha cobrado relevancia en un contexto de creciente insatisfacción laboral. Teamsters también ha organizado piquetes en cientos de centros de distribución en todo el país, en respuesta a la negativa de Amazon a sentarse a la mesa para negociar adecuadamente los términos laborales.