El comunicador Abel Guzmán abordó las problemáticas y desafíos del tránsito en la ciudad de Santo Domingo. “Aquí nadie quiere que lo aprieten, pero gritamos por el desorden del tránsito”, dijo Guzmán, aludiendo a la cultura de rechazo hacia las normativas viales en una sociedad cada vez más congestionada.
Guzmán destacó la necesidad de una “transformación colectiva” y un compromiso ciudadano para mejorar las condiciones viales. En su intervención, describió cómo los conductores de motocicletas, así como de vehículos de transporte público, exhiben comportamientos que dificultan la implementación de un sistema de tránsito ordenado.
Para Guzmán, parte del problema radica en la falta de colaboración ciudadana y en el escaso respeto hacia los agentes de tránsito. Según él, las regulaciones, tales como los alcoholímetros o los controles de velocidad, reciben críticas constantes, aun cuando su propósito es reducir los índices de accidentes.
De acuerdo con datos recientes del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), alrededor de 3,000 muertes anuales y 123,000 lesiones están relacionadas con accidentes de tráfico en el país. Guzmán se mostró a favor de los esfuerzos del INTRANT para regular el tránsito y mejorar la seguridad vial. Sin embargo, insistió en que estos esfuerzos resultarán infructuosos si los ciudadanos continúan resistiéndose a cumplir la ley y si se sigue boicoteando cualquier intento de ordenamiento.