En un movimiento hacia la sostenibilidad, el gobernador de California, Gavin Newsom, promulgó el domingo una nueva ley que prohíbe todas las bolsas de plástico en el Estado, afectando a las tiendas de abarrotes y supermercados. Esta medida, que busca mitigar el impacto ambiental de las bolsas desechables, entrará en vigencia en 2026.
Hasta ahora, California ya había implementado una prohibición sobre las bolsas de plástico delgadas en supermercados y otras tiendas, permitiendo aún el uso de bolsas de plástico más grueso, que se consideraban reutilizables y reciclables. Sin embargo, con la nueva legislación, los clientes que no lleven sus propias bolsas solo tendrán la opción de comprar bolsas de papel.
La senadora estatal Catherine Blakespear, quien fue una de las principales impulsoras de esta iniciativa, destacó la falta de reutilización y reciclaje de las bolsas de plástico. “Las personas no estaban reutilizando ni reciclando sus bolsas de plástico adecuadamente”, afirmó. Blakespear se refirió a un estudio estatal que evidenció un aumento en la cantidad de bolsas de plástico que un individuo desechaba, pasando de 3,6 kilogramos (8 libras) al año en 2004 a 5 kilogramos (11 libras) en 2021.
Con esta nueva ley, California se posiciona como un líder en la lucha contra la contaminación por plásticos, promoviendo un cambio hacia prácticas más sostenibles y responsables en el uso de bolsas de compras. La legislación también refleja un creciente consenso en el estado sobre la necesidad de reducir la dependencia de productos plásticos que contribuyen al daño ambiental.