Los propietarios de los negocios afectados por el devastador incendio que ocurrió el pasado jueves en el Mercado Modelo de Santiago expresan su desesperación ante las significativas pérdidas sufridas y la imposibilidad de reabrir sus locales. A pesar de que algunos establecimientos no fueron gravemente afectados, muchos comerciantes se encuentran en una situación de incertidumbre, esperando la autorización para reanudar sus actividades.

El Cuerpo de Bomberos de Santiago continúa con las investigaciones y el levantamiento de evidencias para elaborar el informe final del siniestro, lo que ha retrasado la reapertura de los negocios. Los propietarios, muchos de los cuales dependen del mercado para su sustento diario, describen la situación como desesperante.

Una comerciante, visiblemente afectada, compartió su angustia: “No puedo llevar comida a mi casa ni nada, todo lo que tenía se perdió. Estoy en la calle porque el local de mi esposo y el de mi hijo también se quemaron. Aunque mi lugar de trabajo no fue directamente afectado, no podemos abrir debido a la investigación”.

El Mercado Modelo, una histórica edificación que data de 1946, alberga más de 315 módulos, muchos de los cuales fueron destruidos o dañados por el incendio. Los comerciantes, quienes se dedican a la venta de artesanías, joyería y otros productos, han visto paralizadas sus actividades, lo que ha generado una profunda tristeza y preocupación.

“El proceso de investigación es necesario, especialmente cuando se trata de tantos establecimientos destruidos, pero para nosotros es un golpe muy duro”, comentó otro afectado. Los comerciantes ahora esperan con ansias el final de las investigaciones y la posibilidad de reconstruir sus vidas y sus negocios tras esta tragedia.