Una haitiana residente en República Dominicana ha denunciado que miembros de la banda haitiana “los 400 Mawo” huyeron de militares kenianos y se apoderaron de una parte del pueblo de Jeremías, donde asesinaron a cuatro miembros de su familia. La mujer, visiblemente afectada, solicitó ayuda desesperada desde Pedernales.

En una entrevista con Junior Félix, la mujer relató los horrores que su familia ha sufrido a manos de la banda. “Dos primos míos los mataron, mi hermano lo mataron, mi sobrino. Ni siquiera entregaron los cuerpos para enterrarlos, los decapitaron”, declaró con lágrimas en los ojos.

Destrucción y Muerte

La banda no solo asesinó a sus familiares, sino que también quemaron su casa, mataron a sus animales y se apropiaron de sus tierras. Según la mujer, sus padres lograron salvarse porque no estaban en la casa en el momento del ataque. Muchos residentes del pueblo de Jeremías tuvieron que huir debido a la violencia extrema de la banda.

Con la mirada perdida y llena de dolor, la mujer expresó la desesperación de saber que sus padres están deambulando en la calle, sin hogar ni sustento. “Ellos dejaron vivo a un miembro de la familia para llevar un mensaje: que no vuelvan más, que si regresan quemarán todo”, añadió.

La denunciante también indicó que la policía haitiana parece tener miedo de enfrentarse a la banda, ya que no han intentado retomar el control de Jeremías. “Necesito que me ayuden por mi familia, por mi madre, mi padre que están en la calle, sin nada. La gente les da un poco de comida para sobrevivir”, imploró.

La situación en Haití sigue siendo crítica, con bandas criminales controlando grandes áreas y la población viviendo en un estado constante de miedo e inseguridad. La denuncia de esta mujer es un llamado urgente a la comunidad internacional para que intervenga y ayude a los afectados por la violencia en Haití.

Apoyo Internacional Necesario

Desde Pedernales, la mujer hace un llamado a las autoridades y organizaciones internacionales para que intervengan y ofrezcan ayuda humanitaria a los desplazados y afectados por la violencia de las bandas en Haití. La situación es insostenible y requiere una respuesta inmediata para salvar vidas y restaurar la paz en las comunidades afectadas.