La noche del lunes, la tranquilidad del barrio La Ureña, en Santo Domingo Este, se vio perturbada por un acto de violencia que dejó como saldo la muerte de Edgar Salcedo, de 41 años, quien fue ultimado a tiros mientras se encontraba en un colmado.

Según testigos, Salcedo se encontraba disfrutando de unos tragos y jugando dominó con amigos cuando un individuo, supuestamente vestido como guardia, llegó al establecimiento y abrió fuego contra él sin mediar palabra.

Rosa María Salcedo, madre de la víctima, culpó a la policía por la muerte de sus hijos, quienes han sido asesinados en menos de un año. Señaló que las bandas delictivas están cada vez más visibles en el barrio y cuentan con armamento pesado.

A pesar de que la familia reconoce que Edgar estuvo involucrado en el pasado en la venta de drogas, aseguran que había abandonado esa actividad hacía años y estaba enfocado en su trabajo.

La policía, por su parte, ha iniciado una investigación y está revisando las cámaras de seguridad del área para identificar al agresor. La familia de la víctima denunció que los pandilleros mantienen asediados a comerciantes y residentes en ese sector, y piden mayor presencia policial para garantizar la seguridad de la comunidad.