Un crucero con alrededor de 1,500 pasajeros a bordo se encuentra varado en el puerto de Barcelona, enfrentando una situación delicada debido a que 69 ciudadanos bolivianos a bordo no pueden desembarcar. La causa de esta problemática radica en la falta de un visado válido para ingresar al espacio Schengen europeo, siendo sospechosos los documentos presentados, según las autoridades de la Policía Nacional.
Barcelona era el destino final de estos pasajeros bolivianos, mientras que el crucero tenía previsto continuar su ruta hacia Croacia. Sin embargo, la embarcación permanece anclada en el puerto barcelonés, a la espera de una resolución a la situación. Familiares y amigos de los pasajeros bolivianos han llegado hasta la terminal de cruceros, observando con angustia cómo sus seres queridos permanecen a bordo sin poder desembarcar.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia ha tomado conocimiento de la situación y ha informado que se encuentran realizando gestiones para resolver el problema. El comunicado oficial del gobierno boliviano señala que estos ciudadanos enfrentan dificultades para desembarcar debido a la falta de documentos válidos para ingresar al espacio Schengen.
Por su parte, fuentes del Cuerpo Nacional de Policía han confirmado que los visados presentados por los ciudadanos bolivianos son falsos, y se está investigando si la empresa naviera tenía conocimiento de esta situación.
La embajada de Bolivia en España y el consulado general en Barcelona están trabajando en coordinación con las autoridades españolas y la empresa MSC Cruceros para encontrar una solución. El gobierno boliviano insta a la empresa naviera a ofrecer una solución inmediata, ya que consideran que es responsabilidad de esta verificar la validez de los documentos de sus pasajeros para evitar este tipo de incidentes.
MSC Cruceros ha confirmado que están colaborando con las autoridades españolas para gestionar la situación, y han reconocido que los pasajeros bolivianos viajaban con documentación no válida. A pesar de que en su embarque en Brasil parecía que la documentación era apropiada, las autoridades españolas posteriormente informaron a la compañía de que los visados no eran válidos para ingresar al área Schengen, impidiendo así su desembarco en Barcelona.