El pasado domingo, se reportó la trágica pérdida de trece vidas en un fatídico accidente que ha dejado a la comunidad conmocionada y enlutada.

Según las investigaciones preliminares, la causa del fallecimiento de estas personas se atribuye a la asfixia por sumersión, un suceso desgarrador que ahora ha arrojado luz sobre las condiciones precarias en las que algunos habitantes de la región han estado viviendo.

El incidente ocurrió en el cruce de Peñuelo, en el tramo que conecta Peñuelo con Navarrete. Este cruce ha sido utilizado como una ruta alternativa para evitar el chequeo militar en Jicome, lo que aparentemente ha llevado a un tráfico constante de vehículos, incluido el camión involucrado en el accidente.

Según testimonios de los residentes locales, este tramo de carretera se ha convertido en una opción común para eludir el control de seguridad en Jicome, especialmente los fines de semana, cuando el flujo vehicular aumenta considerablemente.

La noticia ha conmocionado a la comunidad jurídica y al público en general, ya que uno de los distinguidos fallecidos es José Antonio, un renombrado jurista que dejó una profunda huella en el ámbito legal de la República Dominicana. Aunque no era una figura mediática, su influencia en la jurisprudencia del país era innegable. Sus colegas y la comunidad legal lamentan su pérdida y expresan sus condolencias a la familia y amigos afectados.