La marcha anunciada por la dirección del Partido de Liberación Dominicana es un intento de llevar tranquilidad a lo que le queda de base. Esa base está afectada por las diferencias en los estratos altos y medios de dirección que se dividen entre quienes no lo quieren si no que promueven una alianza con la FUPU y quienes creen que esa alianza sería el palo de la gata del partido morado. Si alguien sabe del efecto succión esos son los dirigentes del partido morado que tienen amplia experiencia en eso de tragarse a sus socios. En 1996 cuando los morados hicieron alianza con los reformistas para la segunda vuelta, Jacinto Peinado había logrado 433 mil votos que era un 15% del electorado. Balaguer soltó en banda a los peledeistas en el 2000 y llevó a los rojos a un 24%. De ahí en adelante nada volvió a levantar al partido reformista convertido en bisagra en todos los procesos incluida la folclórica candidatura de Amable Aristy. En el último proceso los reformistas volvieron a contar unos 360 mil votos pero ahora eso es el 8 por ciento del electorado. Puedo contarle la historia de Miguel VArgas y su PRD que en algun momento fueron la gran fuerza política del país. Pero Vargas ni tiene liderazgo ni es un trabajador político. convirtió el PRD en un instrumento de negociación que no llega a 100 mil votos.