La República Libre de Liberland, es una micronación de Europa, proclamada en 2015, y según su canciller Thomas Wall tiene muchas similitudes con respecto a los padres fundadores de República Dominicana y sus aspectos de libertad.
Thomas cuenta que Liberland es un nuevo estado, una pequeña nación pero con grandes ideas.
Esa pequeña parcela de tierra situada entre ambos territorios, tiene presidente: se llama Vit Jedlicka.
Es miembro del partido checo de ideología liberal Ciudadanos Libres.
Su primera medida como presidente le granjeó muchas simpatías: el pago de impuestos es “voluntario”.
El lema del país es una definición clara de sus ideas: “Vive y deja vivir”.
Después de la Guerra de Yugoslavia, quedaron en pie muchos territorios que Serbia y Croacia no reclamaron como propios en la frontera entre ambos países.
Entre ellos la isla de Vukovar, y Gornja Siga, y ahí están esos 7 km cuadrados donde se levanta Liberland.
Ese territorio no está en Serbia, no está en Croacia y tampoco en la vecina Hungría. Usando el precepto de “terra nullius” (tierra de nadie), se fundó la república de Liberland.
Y cualquier hombre o mujer del planeta puede ser ciudadano de Liberland. Es más tiene más de medio centenar de oficinas en el mundo y una en Argentina.
Vit Jedlicka, rápido de reflejos, le dio nombre, autonomía, fronteras y una bandera. Todo desde el de abril del 2015.
Claro que en su elección a presidente no tuvo muchos votos: lo proclamaron su pareja y un amigo de la infancia.